viernes, 23 de marzo de 2007

CRÍTIKA DVD - Camino al trullo

CAMINO A GUANTÁNAMO
Dirección:
Michael
Winterbottom & Mat Whitecross.
Género:
Documental y ficción
Duración:
95 min.
Fecha de estreno en España:
26 Mayo 2006.


Nos encontramos con una película un poquitín diferente a lo que estamos acostumbrados. Pasamos a un género que combina el documental con la ficción, puesto que se cuenta una historia real a través de unos actores, pero a menudo se insertan imágenes de archivo del contexto en que tuvo lugar, así como el testimonio de sus verdaderos protagonistas. Pero vamos a la trama.

Para ponerse en situación y sin spoilear al personal, os comento cuatro cosas.

11 de Septiembre de 2001: los atentados contra las torres gemelas de Nueva York. Los responsables, los talibanes, tienen perfecto cobijo en Afganistán, donde gobiernan, con la oposición guerrillera de la Alianza del Norte. Tras la negativa de Afganistán de entregar a implicados en la masacre, EE.UU. inicia una ofensiva militar en el país, que acabará deponiendo el gobierno integrista afgano; muchos de los prisioneros de guerra del conflicto son trasladados a la base estadounidense de Guantánamo, donde todo el mundo, a día de hoy, sabe qué pasó.

Es en este contexto donde se desarrolla la historia-documental de Camino a Guantánamo. Se trata de la vivencia de 4 pakistaníes que, en octubre de 2001, viajan desde Londres a su país natal porque uno de ellos celebra su matrimonio concertado. Total, que llegan allí y, cosas de la vida, se dicen así mismos en un alarde de inteligencia: ¡¡coño!! estamos seguros en Pakistán, pero… ¿por qué no nos pasamos al país vecino (Afganistán) y aunque esté en pleno inicio de una guerra nos damos un voltio y pasamos la tarde con unas pipas?

Parece mentira, pero esta viene a ser la versión que dan los protas del documental. Que se fueron a ver qué pasaba allí, y claro, como ya se intuye, les pilla todo el merder, los estadounidenses les toman por talibanes y van a parar a Guantánamo sin comerlo ni beberlo. Hombre, la verdad es que como novela de ciencia ficción está bien, pero vamos, que no cuela, que fueron allí por algo más que por ver qué pasaba... Y si es verdad, ya se sabe: quien anda con fuego acaba quemándose.

Claro está que lo que pasó en Guantánamo es otro cantar. Allí se pasaron por el forro el Derecho Internacional (sí, esa asignatura a la que les tenemos tanto aprecio los estudiantes de Derecho, sobretodo cuando vemos su eficacia real…), concretamente la Convención de Ginebra de 1949 (según EEUU los talibanes no eran prisioneros de guerra y, por tanto, no les eran aplicables las normas de protección de la Convención… argumento que es un insulto a la inteligencia cuanto menos).

Y el film tiene el mérito de dar cuenta de lo que es públicamente conocido, pero que quizá nos cuesta visualizar. Ver una dramatización ayuda en estos casos.

En fin, una película que merece la pena ver, aunque sea en DVD.

Lo bueno: cómo está realizado todo el film, combinando imágenes reales de archivo con imágenes de ficción; la interpretación de los actores, que al parecer eran novatos, pero lo hicieron francamente bien; y, ante todo, el parecido más que razonable entre uno de los pakistaníes y Carlos López de Maristas (no sé si nos leerá, pero si lo hace le enviamos un saludo y le informamos de que tiene un doble pakistaní).

Lo feo: en un momento del documental se ve a un montón de muertos en un camino y, cosas del directo, uno hace un gesto. El gazapo lo vio Gilead, que siempre anda atento a estas cosas, y nos partimos la caja repitiendo la susodicha escena del talibán zombi.

Lo malo: que la película da por sentado algunos hechos relativos a aquel conflicto, como el por qué del ataque estadounidense o el papel de la Alianza del Norte. No hubiera estado mal dar alguna explicación, no costaba nada.

Recomendada para... Aquellos que quieran poner imágenes a uno de los mayores escándalos políticos de los últimos tiempos, y que todavía trae cola...